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Las Vegas es muchas cosas, pero probablemente no lo describirías como discreto. Esta divertida ciudad pone a prueba tus sentidos de las formas más emocionantes. Los vestíbulos de los hoteles se elevan en cielos estrellados. Los restaurantes sirven platillos que parecen obras de arte. Acróbatas deslumbrantemente disfrazados surcan escenarios llenos de agua y los clubes retumban de emoción. Sin embargo, en los últimos años, Vegas también ha recibido un gran número de bares que expresan otra faceta de la ciudad. Están callados. Son secretos en algunos casos e incluso necesitas una contraseña para entrar a ellos.

 

Estos bares clandestinos presentan un lado completamente diferente de Las Vegas: refinado, exclusivo y sofisticado. Esto es una muestra de algunos que bien valen la pena.

Ghost Donkey

Hacia la parte trasera del área de comida Block 16, dentro de The Cosmopolitan of Las Vegas, detrás de una puerta negra con nada más que la imagen de un burro, encontrarás un oasis de tequila y nachos conocido como Ghost Donkey. En su interior, las luces crean un resplandor rosado y naranja. Una playlist con beats de world music (piensa: reggae, brasileño, salsa y más) curada por el bartender principal, Ignacio "Nacho" Jiménez, proporciona la banda sonora de esta celebración. Casi se siente como un sueño. Muy distinto a un bar de Nueva York con el mismo nombre, es pequeño (menos de 30 asientos) pero la experiencia es enorme. Los bartenders pueden elaborar bebidas según tus gustos o darte un menú de bebidas especiales. Dos favoritos: Pistolero, a base de tequila, con chile poblano asado ​​y piña; y Mezcal Sun-risa, que combina mezcal y tequila con jamaica y habanero. ¿Hambre? Elige entre varias opciones de deliciosos nachos, incluidos unos con trufas.

 

The Laundry Room

La escena de bares en el Fremont East District of Downtown tiene mucha energía: grandes multitudes, música fuerte y bebidas para todos. Es una sorpresa encantadora que tal vez el más ocupado de todos, el Commonwealth, también sea el hogar de The Laundry Room, un bar clandestino escondido detrás de un librero. Entrar es todo un reto: debes conseguir un número de teléfono secreto directo del personal del Commonwealth y enviar un mensaje de texto para que te den la contraseña de acceso. Sin embargo, una vez que entras, el mixólogo Anthony Partridge reinventa algunos tragos clásicos mientras un pianista juega con las teclas de marfil del otro lado de la habitación. Esta antigua lavandería (de ahí su nombre) es lo suficientemente grande como para unos 12 invitados, por lo que el ambiente es íntimo. Quizás lo más increíble es que no se puede escuchar el ruido de afuera, es como si el alboroto desapareciera por completo.

 

Mr. Coco

La experiencia en Mr. Coco’s, un bar clandestino dentro del Palms Casino Resort, es completamente fuera de serie. Después de registrarse en un escritorio en el piso principal del casino, serás guiado por un pasillo hasta un elevador que te llevará al paraíso de los cocteles. Aquí podrás relajarte en cómodas sillas y cabinas, escuchar melodías en el Steinway baby grand y disfrutar cocteles como el exclusivo MR. COCO con vodka de coco Cîroc, ron Plantation XO, O.M. Licor de coco y lichi, puré de coco, cítricos y bitters. A su propietario y maestro mixólogo, Francesco Lafranconi, le apasionan el brandy y el coñac, así que tiene una gran biblioteca de ambos en el sitio. Si él está allí cuando vayas, pídele que abra una botella de su favorito actual y podrías obtener una degustación privada.

The Barbershop Cuts and Cocktails

Desde el exterior, The Barbershop Cuts and Cocktails en The Cosmopolitan of Las Vegas se parece a cualquier otra barbería de la ciudad: tres sillas de barbero, una pequeña área de espera y un carrito de bar para que los clientes puedan disfrutar mientras esperan. Sin embargo, detrás de una puerta trasera, la barbería da paso a un salón con poca luz. El ambiente aquí es de la vieja escuela, con un bar de caoba con más de 100 años, así como decoraciones de piso a techo recuperados de un granero histórico. Las bebidas aquí son rígidas; los mixólogos almacenan más de 150 bourbons y whiskies de todo el mundo y ofrecen degustaciones organizadas diseñadas para ampliar los paladares de los clientes. Las bandas en vivo completan la atmósfera y llevan de vuelta a la era Rat Pack.

The Underground

Escondido en The Mob Museum Downtown, The Underground es una experiencia clandestina y envolvente a la vez. Como su nombre lo indica, el bar ocupa el sótano del museo, una exhibición viva que detalla los días de la llamada “prohibición”. La instalación cuenta con una destilería y cervecería en funcionamiento; sirve su propia cerveza casera. También hay un complemento de otras bebidas, algunas incluso se esconden en libros ahuecados para surtir efecto. Programa tu visita para unirte a una de las clases de baile semanales que enseñan movimientos clásicos como el Charleston o pasa una noche de jazz semanal. Para entrar, compra un boleto para el museo y toma el elevador de la planta baja o toca la puerta lateral con la contraseña ubicada en la página de Instagram del museo.

1923 Bourbon Bar

Lo último que esperaría encontrar debajo de las escaleras eléctricas de las tiendas del Mandalay Place es un lugar y sala de puros secreta, que es precisamente por lo que 1923 Bourbon Bar es un placer. El bar, en el borde de la sala de juegos del Mandalay Bay Resort & Casino, está abierto los viernes y sábados por la noche y ofrece 50 bourbons y whiskies diferentes. La opción más cara en el estante, The Boss Hog V: The Spirit of Mauve, no es un bourbon, sino un whisky de centeno de 13 años terminado en barrica de calvados. A veces también tienen Pappy Van Winkle. Del lado de los cocteles, un favorito de los invitados es el Gangster´s Holy Grail, que lleva Cantons Ginger Liquor, Fernet Branca, jugo de limón fresco y Crabbies Orange Spice Ginger Beer. Si te gustan los puros, trae algunos y fúmalos en la sala del bar.

 

Esta publicación fue escrita por Matt Villano en asociación con TripsToDiscover.