Le Cirque. Este es el restaurante que buscas si lo tuyo es la comida clásica francesa: Lenguado de Dover, pollo asado y lomo de res. Todo con un toque muy colorido en sus presentaciones y en el lugar, teniendo así un techo alto de circo que le hace honor al nombre del lugar y que te hará sentir como niño otra vez. La recomendación es que pruebes el risotto con trufas blancas alba.
Michael Mina. Como no todo puede ser comida francesa, este lugar te ofrece un menú y un chef totalmente estadounidenses, con platillos clásicos como tártara de atún y chuletón American Kobe. También podrás deleitarte con algunos inventos de Mina, como su pastel de olla de langosta, paletas de helado y una mini flota de cerveza. El restaurante también ofrece una degustación vegetariana, de la que destaca la sopa de patata con tempura de setas forrajeadas.
Nobu. Te presentamos un restaurante que te va a sorprender con su deliciosa cocina japonesa. En la actualidad hay 19 Nobus en todo el mundo, gracias a su creador el chef Nobu Matsuhisa. Su espacio es decorado con bambú y sus especialidades son el ceviche de langosta con sabores cítricos, tempura de camarón de roca con salsa picante y bacalao negro marinado tres días con salsa de miso dulce.